Ya hemos empezado a sacar las chaquetas para afrontar los primeros descensos de las temperaturas. Los días comienzan a acortarse y la noche parece llegar cada día un poco antes, reduciendo las horas de luz solar que disfrutamos en casa. Así, las terracitas y días de playa dejan paso a los relajados y apacibles planes en familia resguardados bajo el calor del hogar. Y es que nada como una noche de película y manta para pasar un viernes de invierno, ¿verdad?
Sin embargo, para poder disfrutar de una vivienda cálida y confortable nos vemos obligados a elevar el gasto de nuestras facturas de luz y gas. El consumo en calefacción y el aumento de la dependencia de la luz artificial hace que hagamos un mayor gasto de este tipo de energías durante el otoño y el invierno, y por eso es hora de recordar algunas de las claves para ahorrar en estos recursos: Consejos para ahorrar luz - Instalar reguladores de luz para controlar la intensidad. - Poner diferentes puntos de luz en salas amplias para evitar iluminar innecesariamente toda la estancia. - Escoger colores claros para techos y paredes de forma que se refleje mucho más la luz natural y haya más luminosidad. - Evitar el modo stand by en los aparatos eléctricos. - Mantener y limpiar las lámparas y bombillas para no desaprovechar su capacidad lumínica. - Emplear tubos fluorescentes en espacios que necesitan estar iluminados durante mucho tiempo. - Emplear bombillas de bajo consumo, que consumen en torno a un 80% menos que las tradicionales, o luces tipo LED, que ahorran hasta un 90%.
Consejos para ahorrar en la calefacción: - Si tenemos que sustituir las ventanas, vamos a aprovechar para mejorar el aislamiento, ya que es por las ventanas por donde más energía se pierde cada día. Así, lo mejor es escoger modelos de PVC, con las que podemos ahorrar hasta un 40%. - Controlar la temperatura interior. Hay que recordar que lo adecuado es contar con una temperatura de entre 20º y 21º pues, según varios estudios, un solo grado más puede elevar el consumo entre un 5% y un 10%. - Ventilar cada mañana durante 10 minutos para renovar el aire del ambiente. No conviene dejarlo más tiempo pues podemos perder mucho calor. - Instalar termostatos nos ayudará a realizar un mejor control de la temperatura e, incluso, programar la calefacción. - Purgar los radiadores antes de poner la calefacción por primera vez por si han acumulado aire en su interior durante el verano. - Cerrar los radiadores de las habitaciones que no usemos.
